Es frecuente encontrarse en un estado depresivo si sufrimos sobrepeso o alguna enfermedad relacionada con una mala alimentación y una mala dieta, por ello es importante tener claro que la mala alimentación y la obesidad van de la mano. Y la obesidad de por sí conlleva diferentes tipos de enfermedades que en muchos casos provocan la muerte.
En la ciudad de Nueva York ya se ha aprobado una medida por la cual se prohibirá la utilización de grasas para frituras en todos los restaurantes de comida rápida. Tal vez no parezca gran cosa, pero es un comienzo, pues aunque sea casi imposible pensar en la desaparición de ese tipo de servicio de comidas, lo que sí es posible es establecer los controles necesarios para garantizar al menos la calidad de los productos que se utilizan para la elaboración de la comida.
Si volver a una alimentación más sana y natural se hace difícil a causa del entorno y la vida veloz, tal vez sea hora de buscar la manera de escapar de esta trampa que nos podría llevar a una muerte segura o, en el mejor de los casos a una «menos vida» cargada de enfermedades demasiado peligrosas para no prestarles atención
Cuidar nuestra alimentación debe ser clave, comer productos sanos, frescos y preparados por nosotros nos puede ayudar a nuestros estados de ánimo depresivos dado que la ingesta de este tipo de comida hace que el organismo vuelva a circular y eso nos ayudara a nosotros mismos.